La peregrinación a Santiago fue el hecho religioso y cultural más destacado de la Edad Media. De hecho, ha sido reconocido por el Parlamento Europeo como el Camino Primer Itinerario Cultural europeo y declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. El descubrimiento del sepulcro del Apóstol Santiago significó un vuelco en la historia espiritual de un continente que pronto se lanzó a labrar un camino para llegar hasta la preciada reliquia.En España, antes del siglo XI, las rutas jacobeas no están bien fijadas. No estaban claros los caminos que seguían los peregrinos. Será en este siglo cuando los reyes establecen hospitales, construyen puentes y calzadas, y por ello se fijan las rutas que seguirán los peregrinos.

El Camino del norte

Nosotros, albergue Paradiso, nos situamos en el llamado “Camino del Norte” que recorre todo el norte de la Península en sentido este-oeste. Este camino transcurre bordeando la costa cantábrica y recorriendo sus grandes ciudades. Por tanto, se trata de un recorrido que nos permite no sólo descubrir la riqueza cultural y humana de la tierra por la que discurre sino también, acercarse a visitar otros centros de peregrinación como el Monasterio de Santo Toribio de Liébana.El Camino ha resurgido en los últimos tiempos para convertirse en un elemento cultural de primer orden que traspasa nuestras fronteras. De esta manera, ha ido creciendo con el paso del tiempo para constituir un hito cultural y un fenómeno turístico destacado.Por ello, nada mejor que el Camino de Santiago para ejemplarizar el potencial que atesora nuestro territorio, pudiendo surgir experiencias maravillosas que contribuyen a generar vida y riqueza, entendida en el más amplio sentido de la palabra.

Santo Domingo de la Barquera

De hecho, son numerosas las notas históricas que recogen el paso del Camino por el municipio de Suances. Un ejemplode ello nos remite al año 987, momento de la concesión de privilegios que hace el conde García Fernández de Castilla a Santa Juliana para favorecer “frates et presbiteros peregrinos”. En 1107 un grupo de cofrades fundó en el término de Cortiguera el monasterio de Santo Domingo de la Barquera. Su finalidad fue la de mantener una barca en que cruzar de un lado a otro la ría Saja-Besaya a peregrinos pobres y ricos, viudas, huérfanos. Esta barquería se mantuvo en servicio durante casi 900 años.